En Septiembre de 2011 escribí, refiriéndome a la compañía en cuestión, que decisiones serias requieren agallas grandes. En ese momento la compañía comunicaba que se dividiría marcadamente en dos: por un lado el servicio físico (entrega de DVDs y BluRays); por el otro, streaming. Y para hacerlo suficientemente evidente hasta le cambiaron el nombre al primer servicio.
La recepción de los consumidores fue pésima. Y del mercado también. La acción se desplomó.
Lo que no todos veían en aquél momento es que en realidad Netflix estaba diciendo claramente a dónde iba a poner todas sus fichas. Y era una apuesta a mediano plazo. La acción, hasta entonces, probablemente estaba inflada por demás. Desde ese momento, también se cayó en exceso. Por eso en aquél post cerré diciendo que esas decisiones que le podían pegar negativamente ese día, lo salvarían a futuro.
Pero un lector anónimo no coincidió. Y me lo dejó saber con varios comentarios. He aquí, entonces, la respuesta:
La acción de Netflix cayó sostenidamente, durante más de un año, hasta un piso de 52,81. Es decir, casi un -80% desde su pico. Pero aún así la compañía mantuvo el foco en sus decisiones: streaming, expansión geográfica, amplitud de devices y otra apuesta con la que hizo la diferencia: contenidos exclusivos. Y en estos días, casi dos años después, viene tocando los 230, cada vez más cerca de su cotización récord.
Nobleza obliga, discutiendo el caso en aquél momento, algunos coincidieron y apoyaron. @pacodegrandi la vio tan clara que hasta se subió a la apuesta. Hace unos días le volví a preguntar cómo le había ido: "...es un papelazo! Te diria de los que mas me dieron de ganar. Y lo banco a muerte. Creo que a futuro tiene mucho para dar y seguir creciendo."
Coincido. Y ojalá el lector anónimo de aquél entonces, me siga leyendo.
te sigue leyendo y te da la razón.
ResponderEliminarEste lector es un convencido que el mercado tiene un componente emocional fuerte, mas alla de los numeros y balances.
Y por esto es que en ese momento afirmaba que la relacion (emocional) con Netflix se habia quebrado.
Pero lo que no parecia tener solucion en el corto plazo, fue mas que reparada por una apuesta fuerte de Netflix como es la produccion de contenido propio de excelencia (House of Cards) que ha logrado dos cosas claves, retener a los suscriptores distrayendo su atencion de su magro catálogo, y tambien captar muchos nuevos suscriptores a partir de la recomendación boca a boca. House of Cards fue un as en la manga, una bala de plata, que Netflix jugo brillantemente en un momento critico.
Es una satisfacción leer este comentario. Lástima que siga siendo anónimo.
ResponderEliminarY coincido: hay mucho de conexión emocional muy bien reestablecida y el aporte de House of Cards fue tremendo. Creo que incluso por encima de lo que ellos mismos esperaban.