Me apasionan las maratones. Me fascina la fotografía.
Mientras se desarrollan los Juegos de London 2012, ¿por qué no arrancar la semana con un post de la disciplina olímpica por excelencia?
Una foto. Y sobre todo, una anécdota.
Algunos creen que es la primera mujer en correr una Maratón. En realidad no lo es. Ni siquiera tiene un tiempo récord. O alguna victoria histórica.
Pero definitivamente, gracias a ella, muchas otras mujeres pudieron hacerlo.
El hecho que la hizo famosa, y que está relatado de manera completa en el capítulo Life is for Participating del libro The Spirit of the Marathon, quedó inmortalizado en esa foto.
Porque si bien se dice que hasta entonces, Violet Piercy y Marie Lousie Ledru, entre otras, habían corrido dicha esa distancia, pocas lo habían hecho de manera oficial.
En 1967, la Maratón de Boston, como la mayoría de las que se hacían hasta entonces, era exclusiva para hombres. Y obviamente los formularios de inscripción ni siquiera solicitaban que se indique el sexo.
Entonces K.V. Switzer se inscribió y recibió el dorsal 261. En medio del recorrido, un organizador se dio cuenta que una mujer se había infiltrado entre los inscriptos e intentó detenerla. Fueron los mismos corredores los que lo frenaron a él. Ese instante quedó enmarcado para la posteridad.
Y ella terminó la Maratón de Boston. La primera mujer en hacerlo con un número oficial. Aún cuando no le aceptaron el tiempo de cuatro horas y veinte minutos que logró.
Tuvieron que pasar cinco años más (y otras tantas atletas infiltradas) para que en 1972 los organizadores oficialmente acepten a las mujeres en dicha competencia. Y para dar contexto, recién en el 1984, la Maratón tuvo su versión femenina durante unos Juegos Olímpicos.
La protagonista de esta historia corrió más de 35 maratones. Ganó la de Nueva York en 1974 y salió segunda en la de Boston al año siguiente con su mejor tiempo: 02:51:33. En ese entonces, esa marca la convertía en el sexto mejor tiempo entre las mujeres en todo el mundo. Pero afuera de las pistas se dedicó a escribir, hablar, e impulsar la importancia de la Maratón y la inclusión de las mujeres.
Hoy el récord femenino es de la británica Paula Radcliffe que en el 2003, en Londres, corrió los 42,195 en 02:15:25. Y, por cierto, en estos días y si el cuerpo se lo permite, estará participando de su quinto juego olímpico.
Una manera distinta de empezar la semana. Y para preguntarnos: ¿cuál será la Maratón en la que nos vamos a infiltrar nosotros en estos días?
Gracias por el dato. Era algo que no conocía, pero que resalta a veces la falta de coherencia con que las sociedades occidentales critican la posición de las mujeres en otras sociedades no-occidentales, cuando hasta no hace mucho eran tan discriminadas o carecían de plenos derechos como en aquellas. Aún hoy se nota su discriminación.
ResponderEliminarHablando de maratones, mujeres y olimpíadas... aca te dejo la historia de Stamata Revithi (mujer griega) que corrio la maraton en las primeras olimpíadas de la edad moderna en 1896!
ResponderEliminarhttp://en.wikipedia.org/wiki/Stamata_Revithi
Ya que estamos supongo te interesara saber la historia de Spyridon Louis, que gano la primer maraton olimpica en 1896 pero que se clavo un vinito a mitad de camino...
http://en.wikipedia.org/wiki/Spyridon_Louis
Este blog se pone bueno cuando comentan.
ResponderEliminarSebas: Tu primer comentario escrito. Gracias. Y coincido con la apreciación. Se sigue evolucionando.
Mike: Fantásticos ambos aportes. Por el primero de ellos me preocupe tanto en clarificar que Switzer no fue la primera mujer en correr una maratón como muchas veces se dice... Pero sin dudas fue la que más ruido hizo.
La que mas ruido hizo no fue ella, fue roberta gibb un año antes, en 1966
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