La información es el único bien que cuando se comparte no se divide, se multiplica. Ese efecto multiplicador hace que Internet crezca a un ritmo vertiginoso, mientras el mundo hace todo lo que puede para seguirla. En una Era en que todo va demasiado rápido, vale la pena hacer una pausa y analizar algunas cosas.
Hace más de 15 años, JRC (un contenedor humano de mucha información) me llevó a Disney. Recuerdo aún que estando adentro de la bola de Epcot Center, recorriendo en trencito la historia de la humanidad, me pidió que preste especial atención al impetuoso avance que se dio desde la invención de la imprenta de tipos móviles de Gutenberg. Se acabaron los manuscritos y la difusión de información se facilitó considerablemente, lo que permitió que la humanidad entera diese pasos agigantados hacia adelante.
Hoy estamos viviendo una revolución similar pero más vertiginosa. Se habla de un prosumidor y la llamada Web 2.0 pone a disposición de todos una imprenta aún más poderosa que la de Gutenberg. En Febrero, Trendwatching habló de una Generación G, que necesita ser generosa para subsistir. Y calificaba al desarrollo de contenido como parte de esa “generosidad”. Algunos números: Wikipedia ya tiene 8.687.877 usuarios registrados y ofrece actualmente 15.741.616 de páginas de información. Más impresionante aún: cada minuto, se suben 13 horas de video a YouTube. Es decir, necesitaríamos 780 años ininterrumpidos para ver el contenido de YouTube del último año. O dicho de otra manera, si una persona dedicase su vida entera a ver esos videos, sólo alcanzaría a ver, aproximadamente, el contenido de un mes.
Probablemente ya hay una generación que no se impresione con esta información. Pero también hay otra que directamente no lo puede entender. Me considero en el medio de ambas. ¿Y ud.?
Sólo para cerrar, el video que presentó Martín Hazan en su exposición en la Jornada de la CAA, producción de Karl Fisch, Scott McLeod, y Jeff Bronman.
Hace poco, envié a algunos amigos esta nota, en línea con lo que aquí se plantea:
ResponderEliminar"Cada vez me sorprendo más al pensar en la cantidad de información que está en el ciber espacio.
Si veo sólo la mía, entre mi Gmail, el facebook, el blog…..es enorme. Y ahora, ya casi no ponen límite. En Gmail tengo cualquier cantidad de archivos, fotos, presentaciones en ppt y hasta vídeos y música, y me dicen que tengo ocupada el 1% de la capacidad que me tienen reservada. Y la del mundo… abismante.
Pero el punto es: esta información debe estar en “alguna parte”. No está en mi PC. Y su almacenamiento, debe ocupar espacio.
¿Alguien sabe, físicamente, donde está la información?"
Saludos.
Interesante pregunta, Victor. Una de esas que los niños de hoy seguro no se harán.
ResponderEliminarY manteniendo la línea de este post, todo lo que necesitamos saber se puede encontrar en Wikipedia. Recomiendo el siguiente link, que si bien contiene cierto contenido técnico contesta en gran parte su pregunta:
http://en.wikipedia.org/wiki/Google_platform
Y por cierto, nuestra información es insignificante para lo que maneja Google.
qué bárbaro todo esto, no? muy bueno el video final... ahora, por favor, que alguien me conteste la última pregunta que queda flotando en la pantalla!!! "SO, WHAT DOES IT ALL MEAN!?"
ResponderEliminarfuera de joda, es muy interesante todo esto... y realmente me asusta. la cantidad de cosas que estan ocurriendo mientras yo escribo estos 2 parrafitos en tu blog bata... no soy nada... no existo hermano!
Gracias por la sugerencia,Bata.Le echaré una mirada.
ResponderEliminarEn todo caso, el ámbito de mis ocupaciones está centrado en la crisis financiera y el sistema previsional chileno.
Tu "link" me lo mandó un amigo a raiz de la duda que indiqué en mi comentario anterior.
Saludos y suerte.
PS:Te felicito por permitir la inclusión de comentarios sin previa aprobación, lo que considero una censura.Yo lo tengo igual en mi blog.
ResponderEliminarSi alguien se interesa por mis divagaciones sobre la crisis financiera y el sistema de AFPs,aquí va la dirección:
http://victorramio.blogspot.com
Fili: no somos nada.
ResponderEliminarVictor: gracias por los comentarios y visita. Ya me he dado una vuelta por su blog. En Argentina, nos da tristeza hablar sobre nuestro sistema previsional.