Aún los románticos que todavía creemos en el amor a la camiseta, sabemos el negocio millonario en que se ha convertido el fútbol. Todos los involucrados, sin excepción, intentan cortar su tajada de esa torta. El Club Atlético Tiro Federal de Rosario no quiere desperdiciar su porción y lanzó recientemente una auspiciosa campaña de marketing con algunos toques europeos e inspirada en los Clubes del primer mundo.
Para entender el contexto, Tiro Federal milita en el Nacional B del fútbol Argentino y cuenta actualmente con sólo 150 socios. Ubicado en el barrio Ludueña de la futbolera Rosario (Santa Fe, Argentina), ya hay en la ciudad otros tres clubes más populares (Rosario Central, Newell’s y Central Córdoba). En sus palmares no hay más que un torneo argentino A, un ascenso a primera, un par de temporadas en dicha categoría (con una histórica goleada a Rosario Central incluida) y tener al goleador de uno de esos campeonatos, Javier Cámpora (¿Qué es de la vida de Cámpora? Juega en el Jaguares de México y ya tiene una entrada en Wikipedia).
Pero Tiro Federal volvió a ser noticia. Lo llamativo es que la nota no apareció en el Olé, sino en El Cronista Comercial. De la mano de Claudio Destéfano, periodista y consultor volcado al marketing deportivo, quieren tener un club que aunque no juegue en primera, sea de primer mundo. El proyecto contempla nuevas instalaciones y una lista interminable de sponsors. Lo interesante es que cada uno de ellos participará de la manera que lo sabe hacer y más le conviene. Por eso se creó el sistema casaca on demand, donde el sponsor de la camiseta varía por partido según conveniencia y ninguno de los sponsoreos fue librado al azar. Así, Prosegur será sponsor oficial de la seguridad de los arqueros, el Banco Finansur patrocinará los bancos de suplentes, las Medialunas del Abuelo avalan las medialunas del área, y la yerba Cachamate es el sponsor oficial del arco que da a la calle Matienzo (sin dudas, la mejor idea del proyecto).
La iniciativa, además, incluye que el chorypan vuelva a la cancha de la mano de una empresa de chacinados y un spa para las mujeres que van a los partidos. Para los chicos habrá un pelotero (fácilmente bautizado PeloTiro) y una versión de estadio para armar made by Rasti (que viene haciendo las cosas demasiado bien desde su relanzamiento). Se prevé también una platea VIP para ver el partido como en el living de su casa, una remodelación del estadio (terminada en el 2012) y una mesa especial en Locos x el Fútbol. Todas estas acciones están enmarcadas por la campaña “Yo Tiro para arriba”.
Más allá del forzado intento de convertir en marca un club, entusiasma la idea de tener algunos retoques estilo europeo en el fútbol local y la creativa forma de sumar sponsors al club. Que no se pierda la pasión y el folklore, pero que mejore el nivel en las tribunas. ¿Se podrá?
jajjaja es muy bueno el post bata... y la verdad que es una noticia bastante llamativa para el mundo del fútbol argentino. porque esto mismo en un equipo de españa o inglaterra no me llamaría para nada la atención. incluso, dejaría de parecerme orignial.
ResponderEliminarpero hablando del fútbol argentino, más todavía del nacional B, creo que es una estocada importante. sin embargo, y siempre opinando desde mi humilde opinión sin tantos conocimientos sobre marketing, creo que primero en el futbol argentino, antes de hacer ese tipo de movidas, hay otras prioridades.
bata, vos muy bien marcaste sobre el final el nivel en las tribunas... es por eso que hasta que no solucionemos la violencia y las deudas financieras en los clubes, todo lo otro, para mi, esta en un 2do nivel. y por ende, hacer cosas de este estilo, pasa a ser una falta de respeto no sólo a los hinchas, que reclaman sábado a sábado un espectaculo sin miedo a la muerte, sino también, al mismísimo futbol argentino.
aclaro que peco de ignorancia al hablar así sin conocer el estado del club. quizás sea el San Luis de las provincias argentinas, puede ser y entonces me retractaría en todo lo que dije... pero lo dudo, es por eso que me anticipé antes de investigarlo y perder el tiempo en una esperanza constantemente frustada...